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La imagen icónica y el centro espiritual de la montaña de Nafarroa es la Iglesia colegiata de Santa María de Roncesvalles (Orreaga). Es la primera de construcción plenamente gótica de Nafarroa y cobija una imagen de la Virgen del siglo XIV. En la sala capitular está enterrado Sancho VII ‘el Fuerte’ y se expone un fragmento de las cadenas rotas durante la batalla junto al la conocida vidriera en la que se representa. Por su parte, la Iglesia de Santiago (s. XIII) simboliza la importancia del Camino en el origen de Orreaga.

Diferentes estilos arquitectónicos se van sucediendo a lo largo y ancho de las iglesias del valle de Erro, en muchos casos superpuestos. Un magnífico ejemplo es la iglesia románica (s. XIII) de Lintzoain. La iglesia San Nicolás de Bari de Auritz posee una fachada renacentista de 1699 y en su interior un retablo mayor barroco, recientemente restaurado, así como una campana de 1612. La ermita de Idoia es de visita ineludible, uno de los lugares más acogedores y especiales de Izaba. También merece mención la iglesia-fortaleza de San Cipriano (s. XV), que llama la atención tanto por su estructura y extensión como por su órgano barroco (1751) y es uno de los pocos ejemplares históricos de Nafarroa aptos para conciertos. En Otsagabia destaca la iglesia de San Juan Evangelista (1200), que guarda en su interior tres retablos renacentistas de considerable valor, piezas de orfebrería y algunos lienzos. Otros templos: Monasterio de Ordena (Erro), iglesia de San Pedro (Orbaizeta), iglesias de San Esteban y San Joaquin, ermita de San Sebastián (Erronkari) o Santuario de Nuestra Señora de Muskilda (Otsagabia).

El Silo de Carlomagno es el edificio más antiguo de Orreaga. Dice la leyenda que aquí están enterrados los francos que murieron en la Batalla de Orreaga (778). También fue durante siglos el cementerio de peregrinos. El cementerio de Auritz (1964), por su parte, tiene forma de círculo, ya que representa la última letra del alfabeto griego, como símbolo del fin de la vida terrenal, mientras que el acceso, que toma la forma de primera letra, representa el inicio de la nueva vida. El valle de Erro es un lugar rico en estelas y en algunos pueblos, como es el caso de Orondritz, todavía se conservan muchas. En Aurizperri se han recuperado y catalogado 25 de los siglos XVII-XVIII.

Las casas de Auritz fueron quemadas en la Guerra de Convención y reconstruidas entre los siglos XVIII-XX. Caben citar por su aspecto o historia Goizueta; Argizarigilearena; Etxezuri, la más antigua; Oiarbide, refugio del general Prim en 1868; o Txikipolit, donde la noche antes de su huida estuvo hospedado Carlos VII con su Estado Mayor y varios generales. Muestra de su importancia histórica, Erro ha tenido varios palacios, pero el del Señorío de Ureta es el más significativo. Morada de importantes caballeros, el palacio fue Cabo de Armería. Erronkari posee grandes y elegantes casas palaciegas de piedra entre las que destacan Casa Sanz, Casa López y Casa Gambra, que se cree están conectadas entre sí por pasajes subterráneos. En Otsagabia son típicas las casas de piedra con tejados muy empinados a dos o cuatro aguas, pero también hay casas blasonadas o palacios medievales como el de Urrutia, Iriarte o Donamaria. En la parte alta de Izaba se encuentran los vestigios de lo que en su día fue un castillo que dominaba toda la parte superior del pueblo.

Erro cuenta con varios puentes medievales de importante valor artístico y Otsagabia conserva en perfecto estado el puente de piedra medieval sobre el río Anduña. En su confluencia con el río Zatoia, existe un crucero pétreo (s. XVI). También en Garralda se conserva un crucero de fuste renacentista en pleno casco urbano, reposición de la cruz de piedra medieval que los ejércitos de la Convención arrasaron en 1794.

De todos los molinos con los que en su día contó Erro, solo queda el de Ureta, reconstruido respetando su estructura primitiva. En Euskal Herria quedan treinta hórreos y la mitad están en Aezkoa, en concreto, en Orbaizeta se pueden ver el de Larrañeta, Etxegarai y Estanquero. En el mismo municipio estuvo la Real Fábrica de Armas y Municiones que, en su corta existencia de un siglo, tuvo una intensa y azarosa historia. Tras fabricar munición durante años, pasó a producir hierro de calidad.

Erro es un entorno rico en dólmenes –la segunda zona de mayor concentración de Nafarroa–. En Aurizberri hay un conjunto de diez dólmenes y en Ardaitz, cuatro conjuntos megalíticos. Asimismo, parte de la estación dolménica de Urepel-Ibañeta se encuentra en territorio de Luzaide.

Orbaizeta es la antesala de una de las zonas naturales más conocidas de Nafarroa: la Selva de Irati, uno de los bosques de hayedos y abetales más amplios y mejor conservados de toda Europa, constituido por cerca de 17.000 hectáreas de vegetación y fauna. En el corazón de la selva está situado el pantano de Irabia, un magnífico y cristalino embalse.